Empresas de todo el mundo han comenzado a explorar el potencial de IA Agentic, invirtiendo en soluciones que van desde agentes conversacionales inteligentes hasta sistemas que ejecutan procesos complejos de negocio. Sin embargo, un reciente informe de Gartner lanza una advertencia potente: más del 40 % de los proyectos de IA agentic serán cancelados antes de finalizar 2027, debido a costos crecientes, falta de retorno claro y debilidades en la gestión del riesgo.Este pronóstico, más allá de alarmar, debe ser interpretado como una señal para reflexionar y actuar estratégicamente: ¿Por qué fracasan tantos proyectos prometedores? ¿Cómo asegurar la continuidad y escalabilidad de la IA en entornos reales de negocio?
El hype, los vacíos y los errores comunes
Muchos de estos proyectos nacen con entusiasmo, pero carecen de una base sólida. Según Gartner, uno de los factores más relevantes en la tasa de fracaso es el famoso fenómeno del «agent washing»: soluciones que se presentan como agentes autónomos cuando en realidad sólo replican automatizaciones básicas sin capacidad real de adaptación, aprendizaje ni toma de decisiones autónoma. Esto crea expectativas irreales y termina erosionando la confianza de los líderes de negocio.
A esto se suma la falta de claridad en los objetivos de negocio, la débil integración con procesos existentes y el escaso foco en métricas de retorno desde la etapa inicial. Muchos proyectos avanzan como ejercicios tecnológicos sin resolver necesidades reales, lo que termina por comprometer su viabilidad. Y por otro lado, la complejidad técnica también juega en contra, al desplegar agentes autónomos implica no solo entrenamiento en datos específicos, sino también control de costos computacionales, gestión de infraestructura escalable, cumplimiento normativo y monitoreo constante. Todo esto eleva los costos operacionales de forma exponencial si no se planifica correctamente desde el diseño.
La IA agentic no está fracasando, está madurando
Lejos de significar un retroceso, esta fase representa una etapa natural del ciclo de adopción tecnológica. Como ocurrió con el RPA, blockchain o la realidad aumentada, los primeros años están marcados por una exploración masiva, seguida por una depuración que permite que sólo sobrevivan las iniciativas más maduras, alineadas al negocio y con arquitectura robusta.
De hecho, Gartner proyecta que para 2028, el 15 % de las decisiones operacionales en las empresas serán tomadas por sistemas agentic, y que un 33 % de las aplicaciones empresariales incluirán capacidades de este tipo. Es decir, estamos apenas iniciando una transformación profunda, donde los agentes autónomos no sólo ejecutarán tareas, sino que participarán activamente en la toma de decisiones.
¿Cómo evitar estar en el 40 % de proyectos fracasados?
Para las organizaciones que desean aprovechar todo el potencial de la IA agentic y no quedar atrapadas en el ciclo del hype, es clave tomar decisiones estratégicas hoy:
- Comenzar con problemas reales, no con tecnologías de moda: La IA debe ser una herramienta para resolver necesidades específicas, no un fin en sí misma, por ende los casos de uso deben responder a objetivos medibles del negocio.
- Diseñar proyectos con continuidad desde el inicio: Más allá del piloto, hay que anticipar el modelo de operación a largo plazo, el costo de mantenimiento y los requerimientos de escalabilidad.
- Priorizar la gobernanza de datos y la arquitectura responsable: Sin datos de calidad ni controles adecuados, los agentes actúan sobre información incompleta o errónea, generando riesgos.
- Implementar «guardrails invisibles» desde el diseño: Esto incluye límites éticos, supervisión humana en decisiones críticas, trazabilidad y monitoreo constante del rendimiento de los agentes.
- Adoptar una cultura de iteración y aprendizaje rápido: Fallar rápido es parte del proceso, por ello, cada error debe convertirse en una lección documentada que alimente futuras mejoras.
Como toda innovación de alto impacto, su adopción debe estar anclada en estrategia, capacidades reales y un profundo entendimiento de los riesgos y oportunidades. Más del 40 % de los proyectos pueden no llegar a buen puerto, pero el 60 % que logre consolidarse marcará la diferencia entre las empresas que innovan de forma sostenible y aquellas que simplemente siguen tendencias. La clave está en construir con visión de largo plazo, rodearse de aliados tecnológicos confiables y conectar cada iniciativa de IA con los desafíos y objetivos reales del negocio.
No se trata solo de innovar, sino de construir soluciones que perduren
Acompañamos a las organizaciones desde la identificación de casos de uso relevantes y alcanzables, hasta el diseño de arquitecturas escalables y sostenibles, siempre con foco en la gobernanza del dato, seguridad, trazabilidad y sobretodo en la adopción al cambio. Nuestra metodología combina visión estratégica con ejecución técnica, ayudando a evitar errores comunes que llevan a la cancelación de proyectos y superar los desafíos de su implementación.